Los combustibles fósiles y sus efectos en el planeta
La contaminación que generan los combustibles fósiles es constante y dañina para el planeta. La combustión de este tipo de combustibles genera emisiones de gases tales como dióxido de carbono, monóxido de carbono y otros gases contaminantes con efectos negativos para la salud y para el ecosistema. Por ejemplo en las plantas electricas, cuando se queman los fósiles, el carbón e hidrógeno reaccionan con el oxígeno produciendo dióxido de carbono (CO2) y agua (H2O). En consecuencia se genera calor y electricidad. Sin embargo, la contaminación del aire por la quema de combustibles fósiles -principalmente carbón, petróleo y gas- está detrás de alrededor de 4,5 millones de muertes anuales en todo el mundo y genera unas pérdidas económicas estimadas en 2,9 billones de dólares, lo que equivale a aproximadamente un 3,3% del PIB mundial, de acuerdo con un estudio realizado por Greenpeace y el Centro de Investigación en Energía y Aire Limpio (CREA).
La contaminación por combustibles fósiles causa 1 de cada 5 muertes, de acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Harvard, en colaboración con la Universidad de Birmingham, la Universidad de Leicester y el University College de Londres, y publicado en la revista Environmental Research. Esto sucede por respirar aire contaminado con partículas procedentes de la quema de carbón, gasolina o gasóleo. Las regiones del mundo más afectadas por las mayores concentraciones de contaminación atmosférica relacionada con los combustibles fósiles son el este de América del Norte, Europa y el sudeste asiático son aquellas zonas con las mayores tasas de mortalidad. Según una nota de prensa de la Escuela John A. Paulson de Ingeniería y Ciencias Aplicadas (SEAS) de Harvard, el mayor y más exhaustivo estudio sobre las causas de la mortalidad mundial (Global Burden of Disease Study) cifraba en 4,2 millones el número total de muertes en el mundo por las partículas transportadas por el aire exterior, incluidas las del polvo, el humo de los incendios forestales y las quemas agrícolas.
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